Els Benaurats viaja en directo en una nave de sonido e imágenes, de duración imprevisible y música escenificada. Un ferrari teledirigido a dúo con viola, un cuarteto que se come el arpa del piano. Llueve, llueven pelotas de ping-pong a ritmo de un sonido intuido. Ponemos una nueva medida al cuarteto de cuerda y el piano, expoliando los extrarradios de la música y de los hallazgos hacemos acción. Es este pues el equilibrio entre los extremos conocidos (y no) de Xavi Losas, los auditivos, los visuales. Un concierto que transforma la atmósfera, con una puesta en escena calculada al milímetro, de cápsulas performativas, de visuales manuales, de herramientas a tocar convertidas en magia.
Xavi Lloses, piano y dirección