“En este momento pocos grupos pueden permitirse el lujo de cumplir treinta y cinco años. La banda de Juan Crek y Víctor Nubla continúa siendo una rara avis, incluso para sus seguidores más entusiastas. Un día hacían art-rock y al siguiente música contemporánea, electrónica experimental o noise puro y duro; unas coordenadas que les han distinguido y distanciado de cualquier otro grupo del planeta, tal vez con excepción de Einstürzende Neubauten, con quien comparten, entre otras muchas cosas, la afición por la polipoesía y el sentido del humor más canalla. Respeto desmesurado para ellos.” (Marc Piñol, GoMag)