“Los BISCUIT empezaron en el 300 a.C., antes de la invención de la rueda y el drum’n’bass, y todavía están aquí, para chasco de advenedizos y críticos musicales. Eran 60’s punks en los ochenta, psicodelia Sub Pop de Screaming Trees en los noventa (bajo otros nombres) y, desde 1993, el tractor de Power-pop y West Coast rock que son ahora. BISCUIT sigue siendo un grupo de garaje —cuatro fans que ensayan en uno—, pero su volumen no es endeble y no es que tengan pocos conocimientos de música. Cinnamon fadeout traslada a vinilo el vendaval de SuperPop —como decía Nik Cohn de los Who— que BISCUIT desata en directo.” Kiko Amat