El caso de Idoia Asurmendi, nacida en Aramaio (Álava), es uno de los más interesantes de la escena vasca. Gracias al boca a boca, sin publicar ningún tema consiguió enlazar un buen número conciertos excepcionales en los que colgó el cartel de «No hay entradas» en espacios tan emblemáticos como Jazzaldia, Museo Chillida Leku, Donostia Festibala, Tabakalera, Victoria Eugenia... Calidad, sensibilidad e historias bien construidas. Ilun eta abar, su primer disco, ha sido grabado en los Estudios Muir de San Sebastián y distribuido por Altafonte.